El
colectivo Tumulto se creo en abril de 2007 y está formado por: |
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El proceso artístico es uno de los intereses constantes de los miembros de Tumulto. Sus piezas taller-performance tienen como tema central el proceso artístico, observado desde distintos ángulos. Desde hace dos años, el colectivo viene desarrollado el formato taller-obra como una experiencia específica que define al propio colectivo. Es un formato híbrido que pretende transgredir los cauces habituales del arte, pervirtiendo la experiencia pedagógica, regenerándola en una pieza artística. |
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TRABAJOS
RECIENTES DE TUMULTO |
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TALLER
DEVOCIÓN y DESEO; DOS CÍRCULOS CONCÉNTRICOS |
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TALLER
ESPIRITUALIDAD Y CARNE, LA LÓGICA DE LA PROVOCACIÓN Facultad de Bellas Artes de Granada del 30 de mayo al 1 de junio de 2008 |
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El objetivo de la segunda edición de este taller propuesto por el colectivo Tumulto es ahondar en el conocimiento de la estructura interna del proceso artístico, en esta ocasión, centrándose en la percepción-representación del cuerpo y de la experiencia espiritual, como polaridad cosmogónica que centra el discurso artístico. El taller “Espiritualidad y Carne. La Lógica de la Provocación” utiliza experiencias performativas como vehículo para la catarsis y reflexión de los participantes. Se trata de cuestionar el conocimiento previamente adquirido e ir más allá de los códigos establecidos, iniciando así el ejercicio de una indagación personal inherente a la actividad artística. El blog del taller: http://espiritualidadycarne.blogspot.com/ |
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TUMULTO
PEOPLE 2008 |
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'Tumulto People' es un trabajo focalizado sobre
el “st-ar-t system” generado en torno a la
práctica, distribución y divulgación del arte contemporáneo.
El proyecto ironiza con humor sobre el status de celebridad, de VIP, de
"people", como atribución social de algunos eslabones
del genoma arte, de entre los que se han seleccionado un número
de treinta personalidades de relevante prestigio profesional y social,
intencionadamente filtrados entre artistas, galeristas, comisarios, mecenas,
etc.
El ejercicio funciona como una doble vanitas, desde la óptica del protagonista y desde la de los componentes del colectivo tumulto, conviviendo en cada una de las fotografías de la serie, como mínimo, dos imágenes –referente y origen– que interactúan desafiando al espectador, al protagonista y al propio sistema del arte. Los diferentes planos de actividad en las imágenes marcan pequeños universos particulares, aislados a veces, pero siempre formando parte de un significado más amplio, dando esto lugar a que se establezcan distintas densidades y niveles de penetrabilidad en su lectura. A pesar de que las fotografías permanecen unidas por un hilo de un insolente voyeurismo –también en dos direcciones–, éstas son planteadas en distintas coordenadas dependiendo del personaje retratado. Así, se produce un movimiento en las actitudes de los “anónimos”, que oscilan entre el respeto, la complicidad, la obediente y sumisa adoración, la pura rendición, la ironía, e incluso en alguno de los casos, la abierta ridiculización. |
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